La huelga indefinida del sector lácteo paralizó ayer las entregas de leche en Galicia. Desde la medianoche del lunes, según las estimaciones de los sindicatos convocantes (UUAA*, XXAA** y Sindicato Labrego Galego -es la primera vez que las tres organizaciones mayoritarias se unen para parar las entregas-), prácticamente ningún camión recogió leche en las más de 11.000 explotaciones de la comunidad.
Sí hubo "alguna presión", según Roberto García (UUAA), por parte de transportistas de Leite Río, que efectuaron
ayer tarde movimientos de cisternas en comarcas como Coristanco o Santa Comba para tratar de disuadir a los ganaderos de las miles de granjas condenadas al cierre si los costes de producción no se trasladan de inmediato al precio que reciben por la leche en origen, 29,6 céntimos de media el litro, en un contexto de continuos incrementos de los piensos y los combustibles
agrícolas.
El sector exige que se ponga fin al "cártel" entre las industrias para "abaratar artificialmente el precio de la leche en Galicia", y prohibir la venta a pérdidas en los supermercados. Cada día los productores tienen que deshacerse de 6,3 millones de litros de leche. García explicó que estudian con ONG y otros colectivos "mecanismos" para donar el producto si la huelga se prolonga.
Para "mantener la tensión y forzar a la industria a ceder", explicó Francisco Bello (XXAA), los ganaderos preparan a nivel comarcal nuevas actuaciones de protesta y concentraciones, como las de hoy ante las fábricas de Leite Río y Lactalis.
Parte importante del problema lo provocan, cómo no, grandes distribuidores como Mercadona, la cadena con mayor importación de leche extranjera (sobre
todo francesa y portuguesa) que envasa como si fuera española. Se
trata, según recoge El Digital de Canarias, "de una materia prima que entra en España a muy bajo precio y
que Mercadona utiliza en sus puntos de venta como producto reclamo, a
poco más de 50 céntimos el cartón, cuando la realidad es que los costes
de producción de la leche y toda la cadena transformadora superan
ampliamente ese precio. Esa venta por debajo del coste real obliga a las
empresas que compran la leche en España a pagar menos en origen si
quieren competir con las marcas blancas. Se trata, pues, de una
competencia desleal que obliga a cerrar las empresas que no entran por
el aro. De hecho, en Galicia, Mercadona veta en sus supermercados marcas
gallegas como Río y Larsa. Lo mismo sucede con la chufa de la
denominación de origen de Valencia, con los turrones de las
denominaciones de Origen de Xixona y Alacant o con un producto tan
básico como el arroz. No estamos hablando de cualquier producto.
Hablamos de productos estrella de la región de la que Mercadona es
originaria. Todo producto con denominación de Origen y que puede 'obligar' a pagar más a los productores es eliminado de los estantes
para así permitir la entrada de productos extranjeros más baratos. El
caso de la chufa es muy representativo, ya que Mercadona vendía entre el
40 y 50% de toda la horchata que se vende en España, con lo que la
eliminación de la chufa valenciana de los estantes supone una condena a
muerte para los pequeños productores. De esta forma, se trae chufa
africana a bajo coste, cuya calidad no tiene nada ver con la chufa
valenciana".
Según distribuya en un lugar u
otro del país, Mercadona utiliza, para su marca blanca, leche de tres fábricas
distintas a nivel nacional. Así, para
Andalucía y Cataluña, la producción para Hacendado llega de COVAP*** (Pozoblanco, Córdoba); la del País Vasco y gran parte del Norte de España proviene
de la de Iparlat, en
Urnieta (Guipúzcoa) y, por último, para Castilla y León y Madrid, se
encarga Lactiber de León, cuya producción, según Mercadona, alcanza los 100 millones de litros de leche. Sin embargo, en su propia memoria anual se cifra "la producción, superior a los 370.000 litros de leche, que 1.400 ganaderos
de 7 Comunidades Autónomas distintas realizan, en su conjunto, para los
interproveedores lácteos Lactiber, Covap e Iparlat".
Desde esos 370.000 hasta los 100 millones es leche extranjera. Desde la misma Junta de Castilla y León se exigía en 2008 el aumento de los controles sanitarios y nutricionales de la leche que se
importa de esos países y que luego se vende en las grandes superficies.
Así, el jefe del Servicio de Agricultura en León afirmaba que "hay que ser más exigentes con los productos que
llegan de fuera, al igual que lo son otros países con los que nosotros
exportamos [...] si nos exigen calidad nosotros debemos hacer lo
mismo", al tiempo que resaltó la apuesta que hay que hacer por los
productos nacionales. El secretario provincial de Ugal-Upa aclaraba que uno de los problemas del sector es la falta de
concienciación de lo importante que es consumir "productos de aquí" para
mantener el sector primario, "que es fundamental en épocas de recesión
económica como la actual".
En la misma línea se manifestaba la Federación de
Empresarios Productores de Lácteos: "al sector primario no se le está ayudando nada".
(*) UUAA = Unións Agrarias
(**) XXAA = Xóvenes Agricultores
(***) COVAP = sociedad COoperativa andaluza ganadera del VAlle de los Pedroches
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