Dime qué prohibes y te diré con quién te acuestas

Según publica la revista italiana Panorama en un reportaje titulado Las noches romanas de los curas gays, una investigación de 20 días en el mundo de la noche gay de Roma con cámara oculta y un cómplice, ha sacado a la luz que tres curas romanos cambiaban sus recomendaciones cristianas diurnas por fiestas nocturnas en bares gays en compañía de chaperos.

Paul, uno de ellos, fue encontrado en una fiesta de un bar gay muy popular en Roma, el pasado 2 de julio, bailando animosamente con dos chaperos semisdesnudos. Una vez fuera del local, el cura invitó al cómplice del reportero a su casa, donde, con una cámara oculta como testigo, el sacerdote se prestó a vestirse con la sotana para mantener relaciones sexuales.

Carlo, un cura importante de la estructura eclesiástica, afirmaba en una grabación que "el 98% de los sacerdotes que le conocen saben que es gay" pero en la Iglesia hay una parte "intransigente" que trata de no ver la realidad y otra "evangélica" que reconoce y acepta la homosexualidad de los sacerdotes. La Iglesia católica prohíbe que los gays sexualmente activos puedan ingresar en los seminarios y en las órdenes religiosas, algo que el reportaje tira por tierra.

El director de Panorama, Giorgio Mulé, aclara que la intención del reportaje es demostrar que "no es un comportamiento aislado".

Aurelio Mancuso, líder histórico de la asociación Arcigay, no se muestra sorprendido por el reportaje ya que es "muy habitual que los sacerdotes asistan a los lugares de reunión de los homosexuales, como saunas, bares y discotecas. Lugares donde ir, pero no sólo para el sexo, sino también para conocer gente [...] yo mismo tuve una una historia con un monseñor hace 15 años".

Una vez más se demuestra que quienes más se afanan en prohibir son los que más tienen que callar. La película documental Outrage, estrenada el 2 de julio en España en el festival de cine gay de Barcelona Fire!!, analiza los casos de una serie de políticos gays -la mayoría conservadores- que se mantienen en el armario y votan contra las libertades del colectivo.

Charlie Crist, el gobernador de Florida, que este año agota su mandato y que ha decidido presentarse al Senado federal como político independiente -ya no es republicano porque las fuerzas ultraconservadoras de su partido le han arrinconado-, siempre votó en contra de la ampliación de derechos a los gays. Cuando su nombre sonaba como candidato de McCain a la vicepresidencia, anunció su boda con una mujer a la que había conocido nueve meses antes, casándose finalmente en diciembre de 2008. El documental ofreció entrevistas que atestiguaban que mantuvo relaciones más o menos duraderas con un joven de Florida.