Podemos anunció ayer que sus diputados renunciarán a la póliza del plan de previsión social que incluye seguro de accidentes y de vida y un plan de pensiones privado para todos los diputados y senadores, cuyas aportaciones de 4.000 euros anuales por diputado ya se suspendieron en enero de 2012, con lo que ya no se podrían beneficiar de él aun queriendo, aunque Pablo Iglesias ignoró este hecho al decir:
"Es una vergüenza que los españoles, con un sueldo medio de 15.500 euros, tengan que sufragar con su dinero este plan". No obstante, los diputados de Izquierda Unida Cayo Lara y Alberto Garzón ya fueron los primeros en renunciar a él, sacando a la luz la existencia de este fondo, en noviembre de 2011 tras conseguir su escaño, cuando sí era posible beneficiarse de él. Lo hicieron exclusivamente diputados de IU, pionera en cuestiones que sólo ahora son mediáticas y sirven para reinventar la rueda.
Al plan, gestionado por el BBVA, se destinaban 2,5 millones de euros anuales de dinero público. Fue aprobado en reunión conjunta del 11 de julio de 2006 de las Mesas del Congreso y el Senado, compuestas, bajo Gobierno de Zapatero, por 5 socialistas (3 en la del Congreso, entre ellos y como Vicepresidenta Primera de la Mesa, Carme Chacón, y 2 en la del Senado), 7 populares (4 + 3), 2 de CIU (1+1), 1 del PNV (en la del Senado) e Isaura Navarro en la del Congreso, la cual abandonaría IU al no ser designada número uno por Valencia por las bases de Esquerra Unida. Concurrió entonces, formando parte de Iniciativa del Poble Valencià, en las listas de Compromís, que sí la puso como número 1.
Un día después de la renuncia al plan de pensiones (cuando estaba vigente y no ahora, cuando es muy fácil renunciar a lo que no se tiene), Cayo Lara estuvo en la manifestación que recorrió Úbeda en apoyo a las trabajadoras de Clece. Posteriormente, CCOO aprovecharía para colgarse la medalla de "haber obligado al alcalde del PP a echarse atrás de su intención de prescindir de las trabajadoras que actualmente prestan servicios en la concesión que tiene adjudicada Clece".
Al plan, gestionado por el BBVA, se destinaban 2,5 millones de euros anuales de dinero público. Fue aprobado en reunión conjunta del 11 de julio de 2006 de las Mesas del Congreso y el Senado, compuestas, bajo Gobierno de Zapatero, por 5 socialistas (3 en la del Congreso, entre ellos y como Vicepresidenta Primera de la Mesa, Carme Chacón, y 2 en la del Senado), 7 populares (4 + 3), 2 de CIU (1+1), 1 del PNV (en la del Senado) e Isaura Navarro en la del Congreso, la cual abandonaría IU al no ser designada número uno por Valencia por las bases de Esquerra Unida. Concurrió entonces, formando parte de Iniciativa del Poble Valencià, en las listas de Compromís, que sí la puso como número 1.
Un día después de la renuncia al plan de pensiones (cuando estaba vigente y no ahora, cuando es muy fácil renunciar a lo que no se tiene), Cayo Lara estuvo en la manifestación que recorrió Úbeda en apoyo a las trabajadoras de Clece. Posteriormente, CCOO aprovecharía para colgarse la medalla de "haber obligado al alcalde del PP a echarse atrás de su intención de prescindir de las trabajadoras que actualmente prestan servicios en la concesión que tiene adjudicada Clece".
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