En el programa electoral de IU Extremadura figura facilitar el crédito a las pequeñas y medianas empresas destinando, entre otros, los 500 millones de euros que la Junta de Extremadura pretende dedicar a la Refinería Balboa, a microcréditos a autónomos y emprendedores por valor de entre 20.000 y 25.000 euros cada uno.
Ya en entrevista concedida a Extremadura Al Día el número 1 de IU a la Asamblea, Pedro Escobar, lo había adelantado: "una vez que [la Refinería] esté en marcha, eso funciona con 100 personas, está todo informatizado y automatizado [...] En vez de apostar por la pequeña y mediana empresa, por los autónomos, por el sector agroindustrial con productos de calidad, han apostado por una opción errónea, no solo por el tema ambiental sino también por el económico. En Extremadura el año pasado hubo casi 3.000 PYMES que cerraron y más de 2.000 autónomos abandonaron su actividad. Si el dineral que hay que poner para la refinería se reparte en microcréditos a todas esas pequeñas empresas, eso crea y mantiene muchos más empleos que tener refinería porque en Extremadura la estructura económica es de pequeña empresa. Hay empresas que están cerrando por tener deudas de 10.000 o 15.000 euros."
A todas luces, algo realizable y bastante más explícito y efectivo que el genérico y cacareado apoyo del PP al pequeño empresario. El PP no se va a preocupar de esas empresas que cierran por deudas de 15.000 euros, sino por que el enemigo del pequeño comercio (según el PP de Mérida, ya están negociando con El Corte Inglés) pueda instalarse en la zona del antiguo cuartel militar Hernán Cortés en Mérida. ¿No será mejor la propuesta de IU de contruir en esa ubicación la sección visigoda del Museo Nacional de Arte Romano para "contextualizar el bagaje de los fondos del museo" en los restos de esa cultura hallados allí? El "espacio y accesibilidad que ofrece el recinto del antiguo cuartel militar lo sitúa como la ubicación más idónea". La propuesta incluye, además, que junto al Museo Visigodo se cree una ciudad museística, en la que situar el conjunto del patrimonio cultural disperso actualmente en diferentes edificaciones e incluso daría "salida a las piezas de nuestro patrimonio que no encuentran lugar de exposición debido a la falta de espacios adecuados".
También Izquierda Unida-Mérida propuso la semana pasada la construcción de un parque municipal de locales comerciales y su posterior cesión a jóvenes y parados en régimen de alquiler de escasa cuantía. El fomento del autoempleo y la puesta en marcha de ayudas para los autónomos y el pequeño comercio son generadores de empleo y elementos de vertebración social en los barrios. “El acceso a locales comerciales en condiciones económicamente asequibles para aquellos que quieran iniciar su propio negocio supone una barrera infranqueable, que frena la oferta de bienes y servicios en nuestras ciudad, y concentra el volumen de comercio en determinadas áreas de la ciudad”. Concepciones como ésta de la política municipal se expondrán hoy miércoles 4 de mayo a las 20:30h en el Centro Educativo Municipal de Don Benito durante el acto público sobre políticas municipales con los candidatos de IU de Don Benito, Villanueva, Mérida y Badajoz.
Además del pequeño comercio, las empresas vinculadas a la riqueza cultural, José Antonio Monago (PP) también se olvida de otras muchas pequeñas empresas que intentan introducirse en un mercado con futuro pero necesitado del apoyo institucional. El candidato popular acaba de decir en entrevista a Voz Emérita que "estamos hablando de la necesidad de producir alimentos, comercializarlos y venderlos al mundo. Y nosotros tenemos tierra, agua, energía y trabajadores para explotarla. Teniendo estas cuatro cosas no podemos entrar en otros inventos como la dependencia y las renovables".
Pues el "invento" de las renovables consigue logros como que Mérida sea la sede de un proyecto de energía termosolar que pondrá en marcha la empresa Torresol Energy con una inversión de 960 millones de euros para llevar a cabo cuatro torres, cada una con una potencia de 50 MW para abastecer a más de 175.000 hogares, suponiendo un ahorro de 222.000 toneladas de CO2.
La compañía estima que durante la construcción se generarán 3.200 empleos, para posteriormente crear 120 puestos directos (tantos como el "invento" de la Refinería que tanto apoya el PP), de los cuales el 70% serán cubiertos por técnicos especialistas y titulados medios, esos que siguen emigrando de Extremadura, aunque al presidente extremeño le baste para sus estadísticas con sumar a los que un día tuvieron que emigrar a Europa y hoy retornan, para decir que no hay emigración.
Pues imaginen que además las instituciones públicas tuviesen capacidad de decisión y participación en beneficios para su reinversión como contrapartidas a la entrega inicial de dinero. Los ciudadanos podríamos pagar mucho menos por la electricidad que consumimos.
El supuesto apoyo del PP al pequeño empresario, lo esclarece Manolo Saco en su blog: "en cada discurso Mariano Rajoy derrama cien veces la palabra 'emprendedores', como una letanía, aunque en la comunidad de Madrid su partido acabe de suprimir por decreto el IMADE, el Instituto Madrileño del Desarrollo, que no era otro que el de los emprendedores". Y después de deshacerlo en Madrid, el PP viene ahora a proponer en Extremadura la creación de "una dirección general de la actividad emprendedora".
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