La contratación de la nueva cartografía del Plan Especial de Cáceres en 3D, tras la quiebra de la anterior adjudicataria en la "fase concursal" del trabajo, ha recibido 4 propuestas, según calificó el jueves la Mesa de Contratación, aunque una quedó excluida "por no cumplir los requisitos de solvencia", para "dotar al municipio de Cáceres de una nueva infraestructura de información cartográfica digital de precisión de todo el núcleo urbano" y realizar un escenario en tres dimensiones interactivo del municipio, accesible desde diferentes plataformas como Internet o teléfonos móviles inteligentes.
IU proponía que el expediente, licitado en 195.000 euros, "se aparque para tiempos mejores" y, de esta forma, no se recorte presupuesto de las ayudas sociales y la cooperación con los países en vías de desarrollo: "No es de recibo que en estos tiempos de crisis, donde el Gobierno municipal recorta las ayudas de cooperación, se congelan las partidas de ayudas sociales, se suben los impuestos municipales y no se puedan dar servicios por falta de personal, se dedique dinero para proyectos de imagen".
Ponía de manifiesto estos recortes Leire Pajín el día 10 en Público (diario que, desgraciadamente, desde hoy ya no estará en el quiosco): "La reducción de cerca de un 40% de los fondos destinados a la cooperación española y la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD), respecto al presupuesto de 2011, pone en peligro al sector de la cooperación internacional y el trabajo desplegado en los últimos años por Organizaciones No Gubernamentales de ayuda al Desarrollo (ONGD) y las instituciones del Estado, incluyendo comunidades autónomas, diputaciones provinciales, cabildos y ayuntamientos, que presentan también recortes del 14% en su conjunto.
El recorte de 900 millones de euros de AOD es brutal [...] Olvida el compromiso de España con la consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y rompe el consenso político y social sobre el hecho de poder alcanzar la aportación del 0,7% de la Renta Nacional Bruta (RNB) en AOD para 2015. [...] desvela la sensibilidad tosca del Gobierno y el escaso compromiso de la política y la acción exterior del presidente Mariano Rajoy. [...] se inscribe directamente en el ámbito de la irresponsabilidad. [...] Es sincero reconocer que se había iniciado una tendencia descendente en los últimos años [...] Sería un error estratégico empobrecer o abandonar nuestros programas orientados a la educación, la igualdad de género, la salud y especialmente la seguridad alimentaria [...] En épocas de crisis económica, cuando los recursos públicos se reducen, la apuesta inteligente y justa es priorizar [...], evitando que la reducción de AOD vaya acompañada de pérdida de calidad de la misma, dispersión o condicionalidad.
Debemos mantener los ejes estratégicos para garantizar una ayuda predecible, evitar decisiones aleatorias y garantizar una coherencia en las políticas de desarrollo. [...] las políticas cortoplacistas son sólo paliativas y no inciden, como las de largo alcance, en la raíz de los retos que lastran el avance de los derechos y la seguridad humana en el mundo. [...] de lo contrario, los desequilibrios y las injusticias se volverán contra nosotros. Reconocer estos principios e integrarlos en la política de Estado de cooperación internacional son exigibles a este Gobierno, que ha hecho saltar todas las alarmas solidarias y el SOS de la cooperación española".
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, apuntaba un día antes que el recorte respecto a los 3.200 millones de euros de 2011, que ya descendieron, a su vez, en más de 1.000 respecto a 2009, se verá compensado con un "margen de maniobra" de 4.000 millones hallados porque su predecesor "no tuvo tiempo de ejecutar" el presupuesto destinado.
Leire Pajín dijo tras la elección de Barack Obama: "amanece un tiempo nuevo para la paz, las relaciones multilaterales y los derechos sociales", principios que su partido se jacta de asumir. Pero el entonces portavoz de IU-ICV, Joan Herrera, alertó de que el dinero destinado a cooperación se iba a reducir, de 5.509 millones de euros en 2008, a 5.277 en 2009, a lo que había que sumar el recorte presupuestario de 353 millones (73 en la primera fase y 280 en la segunda), realizado por primera vez, dentro de las medidas de ahorro aplicadas como consecuencia de la crisis.
IU proponía que el expediente, licitado en 195.000 euros, "se aparque para tiempos mejores" y, de esta forma, no se recorte presupuesto de las ayudas sociales y la cooperación con los países en vías de desarrollo: "No es de recibo que en estos tiempos de crisis, donde el Gobierno municipal recorta las ayudas de cooperación, se congelan las partidas de ayudas sociales, se suben los impuestos municipales y no se puedan dar servicios por falta de personal, se dedique dinero para proyectos de imagen".
Ponía de manifiesto estos recortes Leire Pajín el día 10 en Público (diario que, desgraciadamente, desde hoy ya no estará en el quiosco): "La reducción de cerca de un 40% de los fondos destinados a la cooperación española y la Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD), respecto al presupuesto de 2011, pone en peligro al sector de la cooperación internacional y el trabajo desplegado en los últimos años por Organizaciones No Gubernamentales de ayuda al Desarrollo (ONGD) y las instituciones del Estado, incluyendo comunidades autónomas, diputaciones provinciales, cabildos y ayuntamientos, que presentan también recortes del 14% en su conjunto.
El recorte de 900 millones de euros de AOD es brutal [...] Olvida el compromiso de España con la consecución de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y rompe el consenso político y social sobre el hecho de poder alcanzar la aportación del 0,7% de la Renta Nacional Bruta (RNB) en AOD para 2015. [...] desvela la sensibilidad tosca del Gobierno y el escaso compromiso de la política y la acción exterior del presidente Mariano Rajoy. [...] se inscribe directamente en el ámbito de la irresponsabilidad. [...] Es sincero reconocer que se había iniciado una tendencia descendente en los últimos años [...] Sería un error estratégico empobrecer o abandonar nuestros programas orientados a la educación, la igualdad de género, la salud y especialmente la seguridad alimentaria [...] En épocas de crisis económica, cuando los recursos públicos se reducen, la apuesta inteligente y justa es priorizar [...], evitando que la reducción de AOD vaya acompañada de pérdida de calidad de la misma, dispersión o condicionalidad.
Debemos mantener los ejes estratégicos para garantizar una ayuda predecible, evitar decisiones aleatorias y garantizar una coherencia en las políticas de desarrollo. [...] las políticas cortoplacistas son sólo paliativas y no inciden, como las de largo alcance, en la raíz de los retos que lastran el avance de los derechos y la seguridad humana en el mundo. [...] de lo contrario, los desequilibrios y las injusticias se volverán contra nosotros. Reconocer estos principios e integrarlos en la política de Estado de cooperación internacional son exigibles a este Gobierno, que ha hecho saltar todas las alarmas solidarias y el SOS de la cooperación española".
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, apuntaba un día antes que el recorte respecto a los 3.200 millones de euros de 2011, que ya descendieron, a su vez, en más de 1.000 respecto a 2009, se verá compensado con un "margen de maniobra" de 4.000 millones hallados porque su predecesor "no tuvo tiempo de ejecutar" el presupuesto destinado.
Leire Pajín dijo tras la elección de Barack Obama: "amanece un tiempo nuevo para la paz, las relaciones multilaterales y los derechos sociales", principios que su partido se jacta de asumir. Pero el entonces portavoz de IU-ICV, Joan Herrera, alertó de que el dinero destinado a cooperación se iba a reducir, de 5.509 millones de euros en 2008, a 5.277 en 2009, a lo que había que sumar el recorte presupuestario de 353 millones (73 en la primera fase y 280 en la segunda), realizado por primera vez, dentro de las medidas de ahorro aplicadas como consecuencia de la crisis.
En cuanto al “tiempo nuevo para la paz”, España había terminado 2007 como 8º exportador mundial de armas y demás material de Defensa. En 2008 incluso se incrementaron las ventas un 0,6%, hasta los 934,4 millones de euros, según las cifras presentadas por la entonces Secretaria de Estado de Comercio, Silvia Iranzo, en el Congreso. La Asociación Española de Fabricantes de Armamento y Material de Seguridad y Defensa elevó las exportaciones hasta los 1.443 millones.
Con datos del Ministerio de Industria, del que pasó a depender Comercio, el volumen de las exportaciones de armas había crecido un 130% desde 2004, convirtiendo al régimen religioso de Irán en el primer destino de nuestras exportaciones de productos y tecnologías de doble uso civil y militar, con el 40,2% de ellas (61,95 millones de euros).
Y para terminar la comparación con Obama, su país había firmado con Gibraltar un acuerdo sobre el requerimiento por parte norteamericana de información necesaria para reforzar la legislación fiscal estadounidense, incluida la relativa a cuentas bancarias en el peñón. No hay comparación.
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